No creo necesario recordar la anécdota que nos narra el Hno. Juan Bautista, en el libro de Enseñanzas Espirituales. Cuentan que un día, Marcelino, explicando el evangelio de la fiesta de Santiago en que la madre de los hermanos Zebedeos le pide a Jesús el primer puesto para ellos en su futuro reino, Marcelino comentó a los hermanos que también él quería que los maristas ocupasen los primeros puestos en tres sitios muy especiales. El primero de ellos era en el portal de Belén.
Ante esto me pregunto: ¿Qué vería Marcelino importante en el portal de Belén? ¿Por qué proponerlo como un lugar para tener presente? ¿Qué aprendió Marcelino al contemplar el portal de Belén?
Quizá la petición de posada tenga que cambiar este año para permitirnos acercarnos a la experiencia de Marcelino.
(Si quieres puedes poner tu respuesta a estas preguntas en los comentarios)
(Continuará)
(Imágen: Giorgione - Adoration of the Shepherds tomada de commons.wikimedia.org)
En mi opinión Marcelino veía que en el lugar más humilde pese a todas sus carencias Dios se puede hacer presente y realizar cosas inimaginables y maravillosas.
ResponderEliminarA Dios no le importa nuestros defectos o lo poco que tengamos, Él nos ama tal y como somos, así como el portal de Belén.
Lo que aprendemos del portal de Belén es que puede haber situaciones apremiantes y donde tenemos muchas carencias y aún así Dios está con nosotros.